La Cámara Nacional del Maíz Industrializado (CANAMI), se fundó en el año de 1976 y actualmente se rige por la Ley de Cámaras Empresariales y sus Confederaciones.
Nuestro objetivo es ser un interlocutor estratégico ante las diversas dependencias del Poder Ejecutivo y Poder Legislativo para poder ser un órgano de consulta y representar los intereses legítimos de nuestros socios, a través de propuestas y análisis de riesgos que nos permita emitir una posición técnica ante las diversas regulaciones que pretenden emitir las distintas autoridades a nivel federal y estatal e influir de una forma positiva en la toma de decisiones.
Actualmente la CANAMI tiene 31 socios
Ser un interlocutor estratégico con el sector público con la finalidad de ofrecer alternativas de solución como órgano de consulta y defender los intereses generales de nuestras empresas afiliadas.
Representar eficazmente a nuestras empresas afiliadas y ser reconocidos como una Cámara Nacional que construye con propuestas y soluciones en beneficio de los consumidores y que promueve el respeto a nuestro marco jurídico nacional.
Esteban Jaramillo
César Orozco
Karina Coronado
Nuestros socios consumen
8 MTM de maíz
Esto representa el 18% del consumo de maíz en México.
3.5 MTM de maíz amarillo
4.5 MTM de maíz blanco
De conformidad con la Ley de Cámaras Empresariales y sus Confederaciones, la Cámara Nacional del Maíz Industrializado registra y actualiza a las empresas ante el Sistema de Información Empresarial Mexicano (SIEM) de la Secretaría de Economía, asimismo:
• Es un órgano de consulta de las distintas autoridades federales y estatales.
• Emisión de certificados de origen para la exportación.
• Participación en negociación de acuerdos comerciales internacionales a petición de la Secretaría de Economía.
• Representación de las empresas afiliadas ante las autoridades federales y estatales.
• Asesoría en temas de normalización, energía, comercialización y tendencias del mercado.
Toda información proporcionada por la Cámara Nacional del Maíz Industrializado es gestionada por el personal de la misma Cámara y no existe un intercambio de información sensible entre las empresas o afiliados.
Lo anterior, en cumplimiento de la Ley Federal de Competencia Económica y conforme a la Ley de Cámaras Empresariales y sus Confederaciones.
Las decisiones económicas de las empresas o afiliados son tomadas bajo su estructura y no incumben en la operación de la Cámara Nacional.